Macas a Puyo

29 de Septiembre 2010

Nuevamente nos despertó el calor, acá amanece como a las 5:30 de la mañana y todo comienza a funcionar como a las 6. Como hace tanto calor es imposible estar mucho rato acostado, sino la sensación de coca cola en la piel se empieza a sentir.

Cuando ya había luz nos dimos cuenta que a nuestro lado habían unas jaulas, había una tortuga, un lorito que ya está acostumbrado al contacto humano y también había una especie de ratón gigante, ese si q se veía asustado, se escondía y se movía de un lado a otro… a que animal le gusta estar encerrado?? A ningunooo, ya estábamos con el Pablo que lo soltábamos…

El hotel también tiene una piscina, aprovechamos hasta el último momento de refrescarnos…

Llegó la hora de dejar el reciento y nos fuimos a despedir y ahí tuvimos pelea…. El tipo nos empezó a cobrar el uso de la piscina… luego de una discusión, donde le repetíamos que él había dicho que podíamos ocupar todo el reciento, nunca excluyó el uso de la piscina, decidimos no pagarle aunque lamentablemente él iba a pagar las consecuencias con su jefa… nos dio lata porque el lokito era simpático y era tímido… luego de eso nos fuimos con una sensación extraña, es tan fácil que se arruine algo tan bakan por no explicitar bien las cosas…

Ese día nuestro destino fue llegar a Puyo, que es la capital de la provincia de Pastaza, la ciudad es como la puerta de entrada a la selva, hay muchos servicios y tiene un gran afluente comercial. El río Puyo es gigante, es navegable por lo que le permite a la ciudad ser un puerto fluvial que lo conecta con varios pueblitos q se adentran en la selva.

La carretera está casi nueva y tiene muy buenos puentes, se nota que ha habido harta inversión para unir el oriente con la sierra. Hay un mirador que permite ver el extenso de la selva, se ve todo planitoo, no hay grande cerros, esa selva es impenetrable y llega al límite con Brasil.

Llegamos a la ciudad sin problemas… ese día nos quedamos en un hotel con internet… salimos a caminar por el pueblo, vimos una mocha de cabros chicos, y haaaartos rayos… nos comimos unos pishirushes y nos fuimos a editar y escribir estas cuestiones que leen!, saludos!.