Ese día salimos a pasear por la parte oeste de la Isla Margarita. En las calles vemos muchos autos antiguos, bueno es normal verlo en toda Venezuela.
En la isla hay una diversidad de paisajes, tienes de todo tipo de playas… playas de arenas blancas, playas con piedritas, playas con conchas… mar tranquilo o con muchas olas. También hay diferentes pueblitos, están lo que son pitucos y otros muy pobres, otros dedicados al turismo extranjero, otros para el turista nacional, hay pueblitos costeros y encontramos uno que estaba en los cerros… para todos los gustos y más.
El sector oeste de la Isla está unida por una península donde se encuentra el Parque Nacional Laguna La Restinga, paramos a ver la laguna… hay varios turistas de todas partes del mundo. Hay un paseo en lancha por la laguna y luego te llevan a una playa, nosotros nos quedamos en el muelle viendo la flora y fauna del lugar. A través del agua logramos ver pequeñas medusas que se movían al ritmo del agua, había también unas estrellas de mar rarísimas, unos cangrejos azules y cardúmenes de peces pequeñísimos, cuando metía los pies al agua se iban todos arrancando.
La laguna está toda rodeada de manglares, es como un bosque pero en el agua.
Continuamos nuestro recorrido por la isla, nos metemos a un camino de tierra. El paisaje cambia, se vuelve todo árido y hay cactus. Llegamos a la Playa El Saco, es una playa muy grande y las olas son un poco más fuertes que en otras partes. Nos dirigimos al final del camino, donde hay un pequeño asentamiento de pescadores. Al parecer no están acostumbrados a ver turistas porque nos miran extrañados.
Salimos de ese sector y luego conocemos un pueblito que se llama San Francisco de Macanao, ese es el pueblo que está en medio de los cerros, en vez de vender peces, ahí se encuentra yuca y zapallos… quizás hay otras verduras pero esas fueron las que vimos.
Cerca de ese lugar está la Playa El Robledal, es una caleta de pescadores más grande, hay varias casas y lo que más vimos fue botes. También vimos algo que nos pareció muy divertido… en la playa había un perrito pescador, las olas dejaban pequeños peces que saltaban en la arena y el perrito corría hasta poder atraparlos, aunque se le hacía bien difícil por lo pequeños y escurridizos que son los bichos esos.
Al ratito llegamos a una playa bien famosa que hay en la Isla, se llama Playa Punta Arenas… algún recuerdo loco nos trajo ese nombre. Había ene gente!!!!!!!! Ahí estuvimos un ratito no más, porque queríamos ver la puesta de sol en otra parte.
Pasamos por Laguna Boca del Río y llegamos a Laguna de Raya, ahí vimos un atardecer bellísimo!!!!!!!!!!! Y el Pollo que es tan buen fotógrafo lo plasmo para la posteridad. Allí hicimos el descubrimiento de las conchas de mar más hermosas que hemos visto en todo el viaje, había miles, nosotros nos inspiramos y recogimos varias para llevar de regalito.
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