Cartagena de Indias a Playa Blanca

18 de Noviembre de 2010

En la mañanita nos fuimos a conocer la ciudad amurallada de día. Caminamos por sus calles, conocimos sus iglesias y plazas. Tiene un carga histórica muy importante, Cartagena fue fundada en 1533 por los españoles, en su época fue un importante puerto comercial. Fue conocida como la ‘Reina de las Indias’. La ciudad ha vivido de todo, fue saqueada por los piratas, se libraron luchas de independencia entre los españoles y los revolucionarios y ahora es una ciudad dedicada al turismo. Tiene construcciones muy lindas, sólo la muralla es un espectáculo arquitectónico.
Vemos algunas negritas que andan con sus tenidas tradicionales, llenas de color y que transportan cosas en la cabeza. Paseamos por la calle donde venden sólo dulces.

Entramos al Museo del Oro de la ciudad, es gratis. El museo tiene piezas de oro maravillosas, un trabajo finísimo de artesanía. Los indígenas de la zona inventaron un sistema moderno para trabajar ese material precioso. Tenían aros, argollas para ponérselas en la nariz, collares, hasta anzuelos tenían de oro. Imagínense todo el oro que había en esas zonas y que fue saqueado por los colonizadores españoles.

Nosotros quedamos medios aturdidos con tanto brillante. En otra zona del museo mostraban las tradiciones de los indígenas de la zona, los lokitos eran bien avanzados para su época, de hecho habían construido un sistema hidráulico para cuando se inundaran sus tierras. O sea no peleaban con la naturaleza, como se hace ahora sino que se adaptaban a las épocas de lluvia. Dejaban terrenos en alto y allí construían sus casas, además hacían surcos gigantes para que pasara el agua y de esa forma drenaban el agua hacia otros sectores. Cuando el agua bajaba de nivel veían que quedaban nutrientes en la tierra, esos nutrientes los indígenas los aprovechaban para ocuparlos como abono para sus plantaciones. Eran muy inteligentes. En la actualidad esa zona también se inunda pero luchan contra eso, ponen barreras y todo pero igual se inunda, no siguieron con las tradiciones de sus ancestros.

Seguimos caminando por la ciudad y entramos a un museo de las esmeraldas, no era un museo sino que era una tienda de venta de esmeraldas, conversamos con las niñas que atienden, son muy simpáticas. Pero a toda costa querían encachuflarnos una joya.

También fuimos a caminar por la muralla de la ciudad, desde un sector vemos el castillos de San Felipe, lo vemos desde afuera solamente. Después vamos a conocer el sector contiguo a la ciudad amurallada donde hay unos teatros y plazas también bonitas. Paseamos por el sector desde donde salen los botes que van hacia las playas bonitas. Ahí nos enteramos de un dato para ir a Playa Blanca, q dicen que es preciosa, no necesitamos ir en tour, podemos ir en la camioneta, sólo debemos atravesar a la isla en un ferri, que nos dicen q es ultra barato.

Después de ese datos vamos arreglar nuestras cosas y partimos a conocer esa playa. Nos metemos a la parte fea de Cartagena, pasamos por el peaje más barato que hemos pagado en Colombia, como 400 pesos chilenos. Y llegamos a un sector llamado Pasacaballos y ahí tomamos un ferri que nos atravesó a la isla, nos costó 4 lucas ida y vuelta. El camino esta pésimo, es pura trocha (sin pavimentar), pasamos por un pueblito que está lleno de negritos y se ve que hay bastante pobreza. Luego de unos cuantos minutos llegamos a un cartelito que indicaba Playa Blanca, entramos y no se veía mucho, solo escuchábamos miles de ranas.

Llegamos a un puesto de vigilancia y nos dijeron que nos podíamos quedar cerca, q ahí no pasaba nada. Antes de instalarnos nos fuimos a pasear a la playa, ya era de noche, estaba nublado pero no hacía frío. En la orilla de la playa hay muchos puestos donde ofrecen bebidas y comidas, como no hay luz eléctrica estaban con velitas.

El agua es calentita y nos quisimos bañar, cuando estaba ya dentro del agua sentimos q una cosa nos andaba persiguiendo, era un cangrejo y casi nos pica, después de ese encuentro cercano no quisimos meternos más al mar de noche.
Ahh y cuando estábamos caminando por la playa varios perritos nos siguieron y se hicieron nuestros amigo y uno en especial que nos cuido toda la noche, el perrito fiel, lástima q no cabe en la camioneta…