domingo, 20 de marzo de 2011

Sao Mateus a Ibitioca

06 de Marzo de 2011

Y llegó el día más importante de mi existencia… el día de mi cumpleaños, son 28 años y me pilló en una de las experiencias más lindas que he tenido en la vida… viajando por Suramérica…

El Pollito me despertó con una serenata matutina, lindo… hizo su mayor esfuerzo para que le saliera afinadito el cumpleaños feliz, jaja.

Ordenamos nuestras cosas, frente a nosotros había una publicidad de accidentes automovilísticos… había un auto destrozado…

Seguimos nuestro viaje… el día está feo, nublado y a veces llueve, además era día domingo y todo está cerrado… no pudimos comprar una torta para apagar la velita. En un principio me bajo la pena… quería estar con mi familia, que me regalonearan… quería que me entregaran mi tarjeta de cumpleaños y también quería comer la torta que me hace mi mami todos los años. Que me dieran mi abrazo… me dio nostalgia. En ese momento quería estar allá, en Rengo, quería compartir con las personas que me dieron la vida y con las personas con las que crecí, mis hermanos. Siento que no soy la única que celebra algo, siento que ellos también están celebrando que llegue a sus vidas.

Quizás ha habido momentos difíciles, porque yo aprendí a ser hija con ellos y ellos aprendieron a ser padres conmigo y mis hermanos… todo lo que soy se lo debo a ellos, a mi madre María Antonieta Cornejo Briones y a mi padre Juan Bahamondes Pizarro, sin ellos yo no sería lo que soy ahora… de ellos aprendí tantas cosas y cada día valoro más sus enseñanzas. Cuando comenzamos el viaje fue difícil para mí la distancia y sé que para ellos también… pero he aprendido que la distancia es una ilusión, los siento tan cerca de mí, que no me importa que estén en la China, yo sé que ellos están a mi lado. No ha habido día que no piense en ellos y doy gracias a la vida porque sé que están bien. También doy gracias por ese amor infinito e incondicional que me entregan siempre… me equivoco mil veces y sé que siempre voy a contar con ellos. Somos diferentes, pensamos diferente, pero hay una fuerza que nos une.

Pensé mucho en mi nostalgia, pero después volví a mi realidad… no puedo ser mal agradecida con la vida… este viaje me ha regalado tantos aprendizajes, tantos lugares desconocidos para mis ojos, he descubierto la amistad en desconocidos… es una por otra. Ese día viajamos todo el día, el Pollito a cada rato me cantaba cumpleaños feliz… qué mejor regalo, qué mejor compañía!. Queríamos llegar a Búzios pero no alcanzamos, eran muchos kilómetros.

Esa tarde llegamos a una estación de servicio… fue hostil porque estaba lloviendo, no teníamos techo y tampoco baño… nos encerramos tempranito dentro de la camioneta a comer una sopa preparada. El Pollo fue al negocio y me compró un yogurt de regalo, ajjaj.

Ah y vimos la evolución de su picadura del Pollo... mmm, no esta sanando y parece que esta más grande... que raro, al principio pensabamos que era una espinilla pero al parecer es algo más grave, buuu!











No hay comentarios:

Publicar un comentario