Nos despertamos con el ruido de los vehículos… recordamos que estamos en el estacionamiento del hospital.
Después de ordenar vamos a conversar un ratito con Miguel… es joven y es director del hospital, es simpático y es diferente a muchos doctores que hemos conocido… saluda a sus pacientes con un beso… a una señora que está acompañando a un familiar en la sala de las camas le ofrece una frazada para el frío… cuando estamos en la calle saluda a todo el mundo por el nombre y pregunta por toda la familia, jajaj. Eso es lo favorable de trabajar en un pueblito pequeño…
Le agradecemos su amabilidad y partimos de nuevo a la ruta.
Cuando íbamos camino a Purmamarca, nuestro próximo destino, pasamos por el lado de una procesión… muchas personas caminando por la ruta, cargaban instrumentos y una virgen.
Los niños de la banda llevaban boinas celestes con blanco. Era una fila larga protegida por la policía.
Al rato llegamos a Purmamarca… de entradita hay un mirador a su cerro famoso… se llama el cerro de los 7 colores, pero yo creo que tiene más colores. Los geólogos deben quedar locos con esa maravilla de la naturaleza… tuvieron que pasar millones de años para que esos cerros tuvieran que quedar con esos colores y esas formas.
El pueblito es lindo y tranquilo, a pesar de que es muy turístico se ve más tranquilo que otros pueblos del mismo sector. Purmamarca tiene una plaza donde están casi todos los puestos de artesanías, además está la iglesia blanquita, todo el pueblito con el fondo de los cerros multicolores … aquí adquirimos dos nuevas mascotas!, el colores y el carehueo!!!, una llamita y un lorito pequeños que nos acompañarán el resto del viaje hasta Chile, para luego entregárselos a la Fabita que nos pidió un lorito!!!.
Las construcciones de las casas son de tipo altiplánico pero mucho más modernas… se pueden encontrar hoteles muy lindos y caritos… además hay unos restaurantes muy top.
Nosotros que somos más sencillos sólo buscamos una panadería para tomar desayuno admirando el paisaje…
Subimos a un cerro donde se puede ver una panorámica muy bella del pueblo y sus alrededores… corre un viento muy fuerte y al Pollito se le cae la botella del agua… no vemos en que parte del cerro cayó… luego de un rato buscándola la encontramos… estaba cerquita de la calle, jaja.
Nos subimos a la camioneta y vamos a recorrer los cerros, el paisaje es bellísimo… cerros de color rojo!! Y unas formas preciosas… con un poquito de imaginación se pueden ver hasta caballos.
Salimos de Purmamarca y el viento se pone más fuerte… pillamos otra vez a la procesión… pobrecitos el día que les tocó para caminar… primero mucho sol y luego una tormenta de tierra!!! Será que así reafirman su fé?? No sé…
Llegamos a Tumbaya, el pueblito estaba todo adornado para recibir a los de la procesión… la iglesia y algunas calles tenían guirnaldas.
Al rato pasamos por Volcán, otro pueblito altiplánico… en este encontramos la estación de trenes abandonada… además hay un galpón enorme donde venden artesanías elaboradas por las mismas personas de la comuna… tenían telares y muchas prendas de ropa elaboradas en lana natural… que ganas de comprar todo, pero sólo salimos con una adquisición, un llamito de lana al que le pusimos Volcán.
Ah, al lado de ese galpón hay una casa antigua donde hay información de la Quebrada de Humahuaca.
Cuando estábamos partiendo vimos un montón de autos antiguos… era una competencia… unos autos espectaculares… se notaba que la gente tenia lucas porque andaban unos autos para controlar la carrera y además unas camionetas de apoyo por si alguien quedaba en pana.
El día estaba feito, feito… mucho frío!!! Llegamos a Jujuy, recorrimos la ciudad y no pillamos ni un lugar para quedarnos… nos comunicamos con una persona que nos iba a alojar en Salta, pero al final nos dijo que no podía, así partimos a buscar otro lugar. Luego de manejar unos kilómetros encontramos un pueblito llamado El Carmen que está al lado del Dique la Ciénaga… en las afuera encontramos el camping municipal y allí nos quedamos a dormir.
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